La reforma de una institución. Septiembre de 1983

 

Después de casi cuarenta y cinco años de existencia, la Organización Nacional de Ciegos (O.N.C.E.) es una Institución sobradamente conocida en el ámbito de los organismos Internacionales que se preocupan de la problemática de los deficientes visuales, en cuyas actividades ha venido participando intensa­mente a lo largo de muchos años.

La O.N.C.E. tras las primeras elecciones democráticas celebradas en su seno el 19 de Enero de 1982, vive un proceso de replanteamiento y reforma institucional que, en la medida en que supone una reflexión crítica sobre los objetivos y logros de una Institución de Ciegos que agrupa a más de veintisiete mil deficientes visuales y, en el momento actual, es responsable de la prestación de la gran mayoría de los servicios existentes en España para este colectivo, puede resultar una experiencia útil para nuestros compañeros de otros países.

Por otro lado, nos ha parecido ésta una buena ocasión para exponer brevemente algunos datos relativos a la situación por la que atraviesala O.N.C.E., los rasgos que caracterizan nuestra experiencia institucional y nuestra posición acerca de los grandes problemas de nuestro sector en el plano interna­cional .

INTRODUCCION.-

Sobre el telón de fondo de multitud de experiencias asociativas, desarrolladas en España durante los años 30, la O.N.C.E. nace en 1.938, por un Decreto dado en plena Guerra Civil. La nueva Institución se creaba, más por móvi­les coyunturales y por la habilidad de un grupo de ciegos que, por la existencia de una política definida del régimen en materia de atención a discapacitados; además de sus señas de identidad ideológicas, el régimen dotó a la O.N.C.E. de un instrumento de financiación de sus actividades: los beneficios de la venta del Cupón Pro-Ciegos. Esta lotería, proporcionaba al mismo tiempo, una solución económica y laboral para los deficientes visuales que no pudieran lograr un em­pleo.

El éxito del Cupón Pro-Ciegos y el esfuerzo de nuestros compañeros permitieron, primero, una consolidación institucional y, más tarde, la progresiva puesta en marcha de un volumen importante de servicios para deficientes visuales. De esta manera se lograron unos niveles de rentas, de equipamiento de servicios y las prioridades políticas del sistema para los deficientes visuales, muy superiores a las que la situación económica del país había podido generar -y de hecho generaba para otros discapacitados- de no existirla Organización.

Por otra parte, la O.N.C.E. cuenta con unos veintisiete mil afiliados lo que, en términos reales, constituye la gran mayoría de los deficientes visuales graves existentes en España. El nivel de reclutamiento es mucho más bajo, en el caso de personas con residuo visual alto o pertenecientes a la Tercera Edad, precisamente por la escasez de servicios específicos que se les ofrecen.

En cualquier caso, la importancia cuantitativa de estas cifras, se ve acentuada por el hecho de que, para bastante más de la mitad de los afiliados, la O.N.C.E. constituye un medio de vida al proporcionarles trabajo -unos diez mil quinientos- o pensiones.

Abierto en España el período de la transición política y, sobre todo, tras la aprobación de un texto constitucional que pone en marcha en nuestro país un sistema democrático y parlamentario, se produce la convergencia en la O.N.C.E. de dos factores: en primer lugar y como elemento fundamental una extendida voluntad de cambio entre sus miembros y en segundo lugar, la exigencia de una transformación que viene dada por el propio contexto socio-político. En síntesis, la finalidad de este proceso de reforma institucional puede resumirse en dos objetivos fundamentales:

–  La adecuación de la estructura de la O.N.C.E. a las exigencias y coordenadas del nuevo contexto democrático, del vigente marco jurídico y de las directrices del Estado en materia de atención a minusválidos.

–  La consolidación de los rasgos que caracterizan a nuestra Entidad y la modernización y ampliación de su oferta de servicios para los deficientes visuales.

I.- PRINCIPALES RASGOS INSTITUCIONALES Y PRINCIPIOS INSPIRADORES DELA ACTUAL ORGANIZACIONNACIONAL DE CIEGOS ESPAÑOLES.-

Las notas fundacionales dela Organización, a saber: su carácter único para todo el Estado y la obligatoriedad -directa o indirecta- de los deficientes visuales para afiliarse a la misma, la autonomía funcional con respecto ala Administración Central y el autogobierno, nos han exigido, en primer lugar, una revisión crítica de las mismas y, en segundo lugar, un esfuerzo por adaptar los aspectos esenciales al contexto pluralista y democrático de nuestro país.

Dicha operación de transformación profunda dela Entidad, conservando algunas de sus características fundamentales -unidad, autonomía y autogobierno-, pero según una lectura democrática de las mismas, no ha resultado en modo alguno sencilla.

1.- UNIDAD.- Lo que en un sistema autoritario constituye prácticamente un axioma, no es jurídicamente defendible en un contexto pluralista y democrá­tico. Por ello, en este momento, en España existe absoluta libertad para la creación de asociaciones de ciegos o la promoción de iniciativas dirigidas a la cobertura de determinadas necesidades asistenciales de las mismas. No obstante, el hecho de que en España la mayor parte de la oferta de servicios de deficientes visuales se halle concentrada enla Organizaciónsupone, de facto, un freno para la proliferación de otras asociaciones hasta niveles que podrían resultar poco operativos.

En el momento presente, puede decirse que la mayor parte de los intentos asociativos surgidos en los últimos años -asociaciones de padres de deficientes visuales, grupos sindicales con un contenido sectorial fuerte- actúan dentro de ella o se hallan vinculados, más o menos críticamente, a la misma. Por otro lado, las iniciativas ajenas ala Organizaciónque en los últimos tiempos vienen apareciendo, -especialmente en áreas como la educación integrada o la investigación- constituyen un aliciente y un estímulo para la mejora de los servicios quela O.N.C.E. viene prestando y que, en ningún caso consideramos completos ni enteramente satisfactorios.

En resumen, como seguramente comprenderán muchos compañeros que viven en países democráticos y conocen las consecuencias de una excesiva dispersión de asociaciones e instituciones de ciegos, estamos intentando hacer compatibles la libertad y el pluralismo con la necesaria existencia de una Entidad que aglutine y coordine los servicios para los deficientes visuales. Esto, en un sistema democrático, puede resultar más difícil, pero también, más auténtico.

2.- UNIDAD INSTITUCIONAL.- Desde el punto de vista de los propios deficientes visuales, nos hallamos muy interesados en conservar la unidad institucional, si bien modificando sustancialmente los esquemas de funcionamiento centralistas, tanto por razones de operatividad, como por constituir una exigencia ineludible de la estructura autonómica que establece la actual Constitución Española. El ejemplo que nos proporciona la situación de dispersión e ineficacia de otras asociaciones de minusválidos, nos ratifica en nuestra posición de mantener una unidad presupues­taria y reivindicativa, que asegure la eficacia de nuestra actuación a nivel del Estado, compatible con una descentralización tan amplia como lo permita la índole de los servicios y una vinculación creciente con las autoridades autonó­micas y locales.

3.- AUTONOMIA.- Igualmente consideramos que, para una sociedad como la española, con un nivel de desarrollo administrativo y unos recursos econó­micos como los existentes en nuestro país, la incorporación pura y simple dela O.N.C.E. ala Administración Centraldel Estado, perjudicaría gravemente el nivel de nuestros servicios actuales y la propia capacidad reivindicativa de los deficientes visuales en España. Frente al modelo paterna­lista de la beneficencia del pasado y al modelo burocrático que podría apuntarse, defendemos una tercera vía consistente en quela Organizaciónde los deficientes visuales disponga de una autonomía institucional compatible con su carácter público y su vinculación ala Administracióndel Estado, tanto en lo relativo al empleo de sus recursos, como a la orientación de los servicios que preste a los deficientes visuales.

Sin que ello suponga una posición inalterable y comprendiendo desde luego, que se trata de opciones que es preciso revisar en cada momento histórico, creemos que la participación directa de los interesados es, a pesar de sus dificultades reales, un elemento irrenunciable, frente a la burocratización,. máxime cuando se trata de sectores de marginados.

4.- EL AUTOGOBIERNO.- En la etapa anterior, los dirigentes dela O.N.C.E. eran ciegos, pero designados directamente por las autoridades del Estado. Se trataba pues de un autogobierno teórico, o, por mejor decir, simbólico. No hay que olvidar, sin embargo, el protagonismo de los propios ciegos ya desde el momento de creación dela O.N.C.E. y el hecho de que, en términos generales, siempre éstos han conservado la iniciativa aún dentro de la estructura autoritaria de la etapa anterior.

En las circunstancias presentes, los responsables dela Organización, son el resultado de la voluntad de sus afiliados expresada en las elecciones democráticas periódicas que en la misma se celebran. La democratización dela O.N.C.E. es, pues, el elemento esencial para el ejercicio del autogobierno por parte de los deficientes visuales españoles.

Después de varios años de tensiones y presiones,la Administraciónpromulgó un Real Decreto en Mayo de 1.981, que, a pesar de sus deficiencias, de todo orden, ha permitido la puesta en marcha de un proceso como el que apuntamos y que, esperamos que en el futuro dará paso a una mejora cualitativa de la situación de los deficientes visuales en nuestro país.

Junto a los rasgos institucionales mencionados, podríamos señalar algunos principios inspiradores de la actual posición dela O.N.C.E.:

  1. –      Creemos en la eficacia de una autonomía financiera que nos permita estar a cubierto de las prioridades políticas que, particularmente en momentos de crisis tienden a olvidar las necesidades de los grupos más débiles o menos presionantes.
  2. –      Asimismo, consideramos imprescindible dar a nuestra Entidad un carácter marcadamente reivindicativo que ha de ser ejercido con medios técnicos suficientes y desde la solidez de una Institución fuerte y unida. Dicho carácter ha de enmarcarse en la convicción de que la resolución de los problemas específicos de los deficientes visuales corresponde al Estado y que sólo por carencia de éste o por insuficiencia de los recursos públicos debe ser asumida por Organizaciones como la nuestra.

II.- ESTRUCTURA ORGANICA Y RECURSOS.-

De manera muy resumida, la estructura orgánica dela O.N.C.E. puede presentarse de la siguiente forma:

  1. –  EL GOBIERNO DELA ENTIDAD.- Esejercido por el Consejo General, Organo integrado por quince miembros, todos ellos afiliados ala Organizacióny que se renueva cada cuatro años, mediante la celebración de elecciones democráticas a las que son convocados todos los deficientes visuales afiliados mayores de 18 años. En estas consultas, se eligen treinta y un Consejos Territoriales, que son los órganos de participa­ción y control en cada una de las Delegaciones Territoriales en que está estructuradala O.N.C.E. A su vez, las Vocalías del Consejo General, son atribuidas de manera automática a las distintas coaliciones electorales, en proporción directa del número de Consejeros Territoriales logrados.
  2. – LA INTERVENCION DELESTADO.- El Estado ejerce su tutela sobrela Organización, a través de un Organo denominado Consejo de Protectorado, que preside el Ministro de Trabajo y Seguridad Social y en el que se integran además de una mayoría de miembros designados por éste, el Presidente del Consejo General, los 2 Vicepresi­dentes del Consejo General y el Delegado General dela O.N.C.E.

Este Organo tiene como funciones genéricas las de velar por la correcta aplicación de los recursos dela O.N.C.E. y la observancia de las leyes en su funcionamiento. El ejercicio práctico de estas facultades, está provocando ciertos conflictos que, en la actualidad se intentan solventar.

  1. –  EL EJECUTIVO.- Bajo la responsabilidad del Delegado General, se estructuran los distintos servicios, centros y dependencias dela Entidad. LaO.N.C.E. cuenta, además de las 31 Delegaciones Territoriales ya mencionadas, con aproximadamente 270 Delegaciones Locales que, en conjunto, se encargan de la administración del Cupón Pro-Ciegos, al tiempo que cumplen funciones de detec­ción, información, asesoramiento y orientación hacia los centros especializados o hacia las ayudas y servicios de que pueden disponer los deficientes visuales en España. Más adelante, nos referiremos, de manera esquemática, a esta oferta de servicios. En estas oficinas trabajan algo más de 1.400 empleados videntes y en torno a 600 deficientes visuales.

El número de vendedores del Cupón es de unos 12.400. De ellos, 9.500 son deficientes visuales y el resto minusválidos a causa de otras deficiencias.

– LOS RECURSOS DELA O.N.C.E.- Merced al esfuerzo y la inteligencia de muchos compañeros,la O.N.C.E. cuenta hoy con un sólido patrimonio mobiliario e inmobiliario. Del presu­puesto consolidado de ingresos para 1.982, el 47’50% se destina a premios del Cupón Pro-Ciegos. Algo más del 32% corresponde a las comisiones y compensaciones percibidas por los agentes vendedores del Cupón Pro-Ciegos. En torno al 11′ 5% del total, se destina a sufragar los gastos de las obligaciones que cubre la Caja de Previsión Social de la O.N.C.E. y sus prestaciones complementarias, que actúan como un sistema sustitutorio de los regímenes de Seguridad Social existen­tes en España.

Por último, unos tres mil cincuenta millones de pesetas, que suponen el 8’50% del total, permiten sufragar los gastos del personal y funcionamiento de las dependencias y centros en que de manera directa se prestan servicios a los deficientes visuales.

III.-LA OFERTA DESERVICIOS PARA DEFICIENTES VISUALES.-

Ya dijimos anteriormente que, como consecuencia de la existencia de una oferta real de servicios, en su mayoría gratuitos, para los deficientes visuales, el nivel de detección de los casos graves, puede considerarse relativa­mente alto. Repasaremos a continuación, si bien muy brevemente, el contenido y el alcance de esta oferta.

  1. –     EDUCACION.- La educación de los deficientes visuales se ha venido realizando en España en la modalidad de centros especiales, de los quela O.N.C.E. posee centros en Madrid, Pontevedra, Sevilla, Alicante y Barcelona para el nivel de escolarización básica y, en Madrid para el nivel medio. En conjunto atienden a más de 800 deficientes visuales en edad escolar, la mayoría de ellos en régimen residencial completo y algunos en régimen de media pensión. A lo largo de la década de los 70, se fueron extendiendo núcleos de asociaciones de padres y servicios de apoyo a la educación de deficientes visua­les en centros ordinarios. En la actualidad, superada la inercia institucional,la O.N.C.E. va extendiendo, en colaboración con otras entidades públicas y socia­les, los servicios de apoyo a la educación integrada, al tiempo que se pretende una reconversión de los centros especiales para que, sin perder su contenido específico, realicen una labor más dirigida a la integración en aquellas situa­ciones en que, por características personales, circunstancias familiares o del lugar de residencia, etc., la fórmula integrada no garantice el desarrollo pleno de las posibilidades personales y profesionales de los alumnos.

En este área, además del apoyo a la educación en régimen integrado se presentan como objetivos inmediatos y prioritarios: la adecuada atención a los plurideficientes, el diseño de programas que tiendan al pleno aprovechamiento del residuo visual en los alumnos que lo tengan y la creación de una estructura que garantice la atención temprana y la educación en la etapa pre-escolar.

  1. –     FORMACION PROFESIONAL.- A partir de los años 60 se va creando una estructura de formación que en la actualidad comprende: una escuela de formación de fisioterapeutas y programas de formación profesional y rehabilitación industrial, de formación de telefonis­tas, así como de capacitación de afinadores y reparadores de pianos y de programa­dores de ordenadores. Estos dos últimos se encuentran todavía en su etapa ini­cial. Todos estos programas, además de la capacitación en técnicas profesionales específicas, se proponen una formación suplementaria que sitúe al profesional deficiente visual en condiciones de superar las barreras subjetivas y la competen­cia de profesionales homólogos no minusválidos.

En este área y en los próximos años nos proponemos consolidar las estructuras formativas para la capacitación de especialistas en el campo dela Informáticay afinadores y reparadores de pianos y apoyar la formación profesio­nal en centros ordinarios de aquellos deficientes visuales -especialmente los que conservan algún residuo alto- cuyas características personales, así como la propia índole de la formación profesional, lo permitan.

  1. –     EMPLEO DE DEFICIENTES VISUALES EN ESPAÑA.- Ya se señalaba antes, el hecho de que el Cupón Pro-Ciegos permite hablar de ocupación plena de los deficientes visuales en edad laboral que desean ejercer este trabajo y no presen­tan deficiencias físicas o psíquicas añadidas que se lo impidan. Hay que recor­dar, que en España, tras la legalización de los Juegos de Azar en 1.977, el juego representa un sector importante dentro de la actividad económica, cuyo volumen sobrepasó en 1.982 el billón de pesetas y que ofrece puestos de trabajo para decenas de miles de personas.

Nosotros consideramos positivo el hecho de la plena ocupación de los deficientes visuales en la medida en que evita un importante número de defi­cientes visuales pasivos, máxime en un país, cuyas circunstancias económicas hacen, hoy por hoy descartable, la posibilidad de unos niveles de pensiones sufi­cientes, reconocidos en base a la deficiencia visual. Somos plenamente conscien­tes, sin embargo, de que esta situación ha debilitado los esfuerzos instituciona­les e individuales por la integración laboral del deficiente visual en _el mercado libre de trabajo.

En efecto, 200 telefonistas, unos 80 fisioterapeutas y algunas cifras simbólicas en otras profesiones (funcionarios dela Administración, profesores en centros públicos de nivel medio, profesionales liberales, …), ponen de manifiesto la insuficiencia de nuestra política de empleo.

En consecuencia, en el futuro constituirá un objetivo prioritario la consolidación de las profesiones en las que los deficientes visuales han probado suficientemente su capacidad, la apertura de oportunidades profesionales en el sector dela Informáticay de la afinación y reparación de pianos, la creación de un marco jurídico que permita y favorezca el ejercicio de la docencia en cen­tros públicos de nivel medio; en fin, la articulación de una política de promo­ción profesional y empleo que haga especial hincapié en el empleo de los deficien­tes visuales en el sector público y en el aprovechamiento del resto visual en el proceso de integración laboral.

  1. –     REHABILITACION DE ADULTOS.- Además de la atención primaria que se presta a

los ciegos adultos,la Organizacióndispone de un Centro de Rehabilitación Social de Adultos en Sabadell en el que se vienen impartiendo cursos intensivos de adaptación a la nueva situación de independencia para el ejercicio de las actividades de la vida diaria y adiestramiento en las técnicas específicas básicas: Braille, movilidad, etc.

Alguno de los aspectos sobre los que pretendemos insistir en este área, en el próximo futuro, son la mejora de la atención primaria a los ciegos adultos recientes, el establecimiento de algún equipo para la atención ambulato­ria y la búsqueda de soluciones, probablemente mediante un programa concertado, para favorecer procesos de readaptación profesional.

La Organizacióndedica asimismo esfuerzos considerables para poner a disposición de los deficientes visuales los instrumentos técnicos específicos, los aparatos adaptados para un desenvolvimiento más autónomo de las actividades de la vida diaria y del hogar así como instrumentos más sofisticados destinados a facilitar el ejercicio profesional de los deficientes visuales. Han alcanzado cifras de distribución significativas: la máquina de escribir, el magnetófono reproductor y grabador de cuatro pistas, el óptacon, (existen cursos regulares de adiestramiento en su utilización), diversos modelos de telelupa, etc.

5.- SERVICIOS CULTURALES.- Además de la aplicación de medidas de estímulo a la realización de actividades artísticas, culturales y de ocio, los medios de quela Organizacióndispone y que en su mayoría resultan gratuitos o suponen una aportación simbólica para los usuarios podrían resumirse de la siguiente manera:

– SERVICIO DEL LIBRO HABLADO: Cuenta con un stock de aproximadamente cincuenta y cinco mil horas de grabación en cintas convencio­nales de cassettes, cuya lectura se realiza en aparatos de cuatro pistas y dos velocidades que ha de adquirir el usuario, cuya importanción facilita y gestionala Organización.            –          _

Existe además un stock de grabaciones para estudiantes y profesiona­les que, en la actualidad, supera las veintidós mil horas, pero cuyo nivel de ordenación y por tanto de accesibilidad, es todavía insuficiente.

–  IMPRENTAS BRAILLE:La Organizacióndispone de dos, con un presupuesto anual conjunto que se aproxima a los cien millones de pesetas, cincuenta y un catálogos de obras impresas, en tiradas que oscilan entre sesenta y ochenta ejemplares y que se distribuyen a las bibliotecas circulantes dela O.N.C.E. en todas las Delegaciones Territoriales y Centros; se acerca a los novecientos títulos. En estos Centros se realiza la impresión de unas ocho publicaciones periódicas en Braille y se atienden las necesidades de libros de texto para nuestros estudiantes y otros de carácter más esporádico.

–  BIBLIOTECAS CIRCULANTES: Existen dos de nivel estatal, con un stock conjunto de títulos que rebasa los trece mil. De cada obra exis­ten uno o dos ejemplares que son enviados, en régimen de préstamo, a los domicilios de los lectores que lo soliciten. Además existen bibliotecas en todas las Delegaciones Territoriales y Centros dela O.N.C.E. en las que, al menos, se cuenta con obras impresas.

Ampliar el número de los usuarios, renovar la tecnología de produc­ción braille y promover la utilización conjunta y la coordinación de los servicios bibliográficos en lengua española por toda la comunidad iberoamericana, son algu­nos de los objetivos fundamentales que nos hemos marcado en este área.

Como puede deducirse de lo expuesto, enla O.N.C.E. coexisten tres realidades heterogéneas: una empresa comercial de primer orden por el volumen económico y de personal que maneja, una Institución que presta servicios especia­lizados para los deficientes visuales y que actúa en un área de competencia y responsabilidad pública y una asociación de deficientes visuales de nivel esta­tal, basada en la solidaridad y en la unidad reivindicativa. Este último aspecto es el que da sentido global ala Institucióny explica, en último extremo, la coexistencia de los tres planos señalados.

Sin ningún género de triunfalismo, exponemos nuestra experiencia, de una gran complejidad, como se ve, pero que también encierra, a nuestro juicio, indudables virtualidades.

IV.- NUESTRA POSICION EN EL PLANO INTERNACIONAL.-

Partiendo del principio de la coincidencia esencial de los problemas de los deficientes visuales en los distintos países -por muchas que sean las diferencias contextuales objetivas- y subrayando, en todo caso, la solidaridad que debe presidir nuestras actuaciones internacionales, por encima de la barreras e intereses nacionales, nuestra posición en el plano supranacional puede resumir­se en los siguientes puntos:

  1. –     Estamos en favor de la unificación de los Organismos Regionales y Mundiales que actúan en el terreno de la defensa de los intereses y la mejora de la situación de los deficientes visuales. Consideramos igualmente que en los Organismos resultantes de ese proceso de unificación, debe garantizarse, en términos cualitativos y cuantitativos la presencia directa de los propios deficientes visuales.
  2. –     La unificación de las Organizaciones Internacionales de deficientes visuales, debe ir acompañada de un cambio cualitativo en las actividades de las mismas. Somos partidarios de la creación y puesta en marcha de Centros y programas de investigación tiflológica, de un servicio de documentación internacional sobre la problemática de los deficientes visuales y de un centro de acopio, evaluación, información y distribución de instrumentos tiflotecnológicos, bien dependientes de las Organizaciones de nivel Mundial o Regional, bien como fruto de la colaboración multilateral de un grupo de países interesados.
  3. –     Consideramos como una de las razones de ser de las Organizaciones Internacionales la defensa conjunta, en el plano supranacional, de los derechos de los deficientes visuales y la ayuda a las Organizaciones Nacionales que lo re­quieran, en su lucha por el reconocimiento de los derechos básicos de los deficientes visuales. En éste, como en otros terrenos coincidentes, considera­mos necesaria la coordinación con otros movimientos internacionales de disca­pacitados .

4.- La constatación de la flagrante distancia que separa a los deficientes visua­les que viven en países muy industrializados y que se hallan muy lejos de tener cubiertas sus necesidades más elementales, de aquellos que residen en regiones desarrolladas, obliga a las Organizaciones Internacionales de deficientes visuales a considerar como un área de actividad prioritaria la de promover programas de cooperación con los deficientes visuales en países no industrializados.

A este respecto,la O.N.C.E., además de su apoyo con carácter general a estos programas, tiene previsto adoptar iniciativas directas con esta fina­lidad y por lo que se refiere a Iberoamérica.

Al terminar estas líneas, queremos reiterar nuestro sincero deseo de que, mediante el mayor conocimiento mutuo y una más estrecha cooperación, consigamos mejorar las condiciones de vida de los deficientes visuales en todos los países y crear las condiciones que hagan posible su plena integración y eman­cipación social.

Madrid, Septiembre de 1.983.